Imaginar nos hace human*s. Cada utopía o distopía que pensamos manifiesta el poder de nuestra mente de proyectarse hacia futuros posibles. La manera cómo nos posicionamos ante estos horizontes de posibilidad y las acciones que tomamos para conseguirlos o evitarlos termina definiendo que tanto nos acercamos o alejamos de cada triunfo y cada derrota.